Flat Design, la tendencia del 2013

Seguramente habrás notado un cambio en la apariencia de las aplicaciones móviles, las páginas web y los sistemas operativos como el recientemente lanzado iOS 7; los diseños simples, los espacios en blanco, la ausencia de elementos con volumen… se han estado apoderando de dichas plataformas, el diseño se está volviendo plano. 

El diseño plano, conocido en inglés como Flat Design es una tendencia que ha ido reforzándose durante todo el año 2013, teniendo como posible inicio la interfaz Metro presentada por Microsoft en su sistema Windows 8; que consiste en un grupo de bloques a manera de botones de varios colores, algunos con íconos simples de un solo color que representan las aplicaciones disponibles en el equipo. Desde entonces su uso fue ampliándose cada vez más y ahora es posible verlo en múltiples aplicaciones electrónicas, e incluso verlo adaptarse a medios impresos, animación y otros.

Características del Flat Design

Aún cuando a primera vista pueda parecer simple, esta tendencia cumple con ciertas particularidades que lo definen como tal:

• Ausencia de efectos tridimensionales: Se utilizan formas regulares y bidimensionales; efectos tales como sombras paralelas, biseles, relieves, degradados, entre otros, son descartados casi al 100%. 

          

• Elementos simples: Se opta por elementos de interfaz sencillos, casi limitándose a íconos y botones para la interacción del usuario con el producto. Se espera que dicha interacción sea intuitiva, por lo cual el proceso de diseño debe pensarse para que el usuario comprenda la utilización del producto desde la primera vez que tenga acceso a él.

          

• Tipografía: En este caso, el texto es el que funciona como desambiguador en el diseño; esto es, mediante la inclusión de palabras clave  el usuario conocerá las funciones de los elementos de la interfaz. Así pues, la elección de las fuentes cobra gran importancia; generalmente se utiliza una sola familia tipográfica con diferentes variables (regular, ligh, bold, italic, condensed, etc.), dicha familia deberás ser clara y legible, así  los estilos pueden variar pero el más utilizado es el sans-serif.

          

• Color: Las paletas de colores en el flat design son muy variables y pueden ir desde una opción meramente monocromática, a una paleta de hasta seis colores diferentes. Sin embargo han de tener en común el ser colores vibrantes y brillantes que destaquen claramente a la vista, los colores retro son de los más utilizados para dicho fin.

          

• Espacios en blanco: Los espacios entre elementos se amplían, tanto por estética como por funcionalidad. Siendo que la interacción de usuario con la interfaz ya no solo se realiza con un puntero sino con sus dedos, el área sensible de los elementos se  extiende generando esos espacios aparentemente vacíos, pero que se complementan con las otras características ya mencionadas.

          

Sea por funcionalidad o por tendencia, es cierto que el flat design se ha estado expandiendo; su utilización ha comenzado a tomar ciertas libertades al utilizar sombras ligeras, degradados simples o el recurso de la sombra larga de 45° en algunos íconos, lo cual pudiera parecer que poco a poco podría regresarse a un diseño tridimensional como hace algunos meses. Aun así, lo importante es mantenerse al día en las tendencias estilísticas de diseño, no por seguir una corriente, sino por posicionar los productos desarrollados no solo por su perfecta funcionalidad, sino por un diseño novedoso siempre tratando de dejar una buena experiencia en el usuario.

Fuente consultada: http://designmodo.com/flat-design-principles/

Acerca del Autor

Karla Aldáz es una estudiante próxima a egresar de la carrera de Diseño para la Comunicación Gráfica en la Universidad de Guadalajara. Ha desarrollado su experiencia en diseño de interfaz mediante su trabajo actual como practicante de diseño en Dawcons. Puedes contactarla en LinkedIn.